SISTEMA ECONOMICO MUNDIAL
ALUMNO: LUIS URDA ROJO
BALANCE DE LA EXPERIENCIA ADQUIRIDA EN LA ASIGNATURA DE SISTEMA ECONOMICO MUNDIAL IMPARTIDA POR EL PROFESOR CARBALLO.
Autor: Luis Urda Rojo
Después de una detenida reflexión sobre el “Balance de los Conocimientos” adquiridos en la clase de Sistema Económico Mundial, a continuación paso a exponer detalladamente las principales cualidades, desde el punto de vista docente, obtenidas de mi análisis:
1ª.- Me ha supuesto conocer un estilo de enseñanza y aprendizaje inaudito, y que, en mi opinión, se debe fomentar más intensamente.
2ª.- Me ha ayudado a conocer en profundidad la materia a estudiar, y me ha permitido familiarizarme con ella, cuestión fundamental para el estudio de cualquier asignatura.
3ª.- Percibir las interrelaciones existentes entre hechos diversos, que, aunque independientes entre sí, a través de la interrelación se puede apreciar su interdependencia.
4ª.- La diversidad temática tratada, principalmente a través de los trabajos grupales realizados y posteriormente expuestos en clases plenarias.
5ª.- El agrupamiento de capital intelectual humano, que por medio del trabajo en grupo debidamente coordinado, desarrolla un enorme potencial de aprendizaje educativo, obteniendo, de esta forma, unos resultados que individualmente serían muy difíciles de alcanzar. Esto es fundamental, “la unión hace la fuerza” y -nunca mejor dicho-, el trabajar en grupos de alumnos resulta muy enriquecedor y gratificante, a nivel personal por el conocimiento mutuo y recíproco entre los alumnos participantes, y a nivel grupal se valora el esfuerzo común realizado para la consecución de los objetivos previamente planificados, que pueden y deben ser conseguidos con el “Balance de Conocimientos Grupal” alcanzado.
Balance de conocimientos que en un principio es individual, pero que al agruparse, y utilizando un término de economía empresarial, se consolidan, es decir, el “Balance de Conocimientos Grupal”, es la suma de los balances de conocimiento individuales de cada uno de los alumnos que componen el grupo.
Para ello, es primordial desarrollar una adecuada estrategia de trabajo a realizar en el grupo, con una equilibrada distribución y asignación de competencias para la consecución de conocimientos, tomando las medidas y resoluciones pertinentes para el desarrollo del trabajo, medidas que habrán de ser, casi con toda seguridad, exitosas y que se podrán percibir a través del retorno aumentado de los conocimientos individualmente adquiridos, y que por medio del intercambio, discusión abierta y utilización de los mismos, se reflejará muy positivamente en el trabajo grupal realizado.
CONCLUSION:
A mi juicio, creo que se debe fomentar intensamente esta forma de impartir la docencia, ya que el “conocimiento” es una de las más considerables “materias primas” de la Sociedad, es inmaterial, intangible y, desde el punto de vista empresarial, inactivable, es decir, no se puede capitalizar en un balance empresarial, porque el individuo y su conocimiento no son bienes raíces de ninguna empresa, aunque ésta los valora sistemáticamente de forma muy positiva para su éxito económico.
miércoles, 20 de febrero de 2008
jueves, 24 de enero de 2008
GLOBALIZACION Y MERCADO DE TRABAJO
En un mundo de economía globalizada el mercado de trabajo ha adquirido una nueva dimensión, ya no podemos hablar solamente de mercado de trabajo a nivel nacional, sino que es preciso refereirse a un mercado internacional globalizado.
En este sentido la cualificación profesional es fundamental para la contratación y mutación laboral, aquellas personas que poseen una alta culalificación personal y dominio de idiomas, principalmente inglés, es más probable que encuentren trabajo en el exterior sin dificultad alguna y con muy alta remuneración, suelen ser puestos de alto nivel ejecutivo.
Sin embargo, para aquellos cuyo nivel es medio o bajo, la contratación en el exterior va a ser más dificultuosa y su salida al exterior es menor.
Pero donde radica la gran bolsa de emigración, es en aquellos colectivos cuyo nivel profesional y de renta, salvo excepciones, es muy bajo y además están en desempleo en sus países de origen, y la única alternativa que tienen es la emigración.
Es aconsejable, para evitar abusos y tráfico de personas, que se adopte una política transparente en aquellos países demendantes de mano de obra, realizando ofertas de empleo con contratos de trabajo de acuerdo con sus necesidades y con un control estricto en los países de origen.
No me atrevo a valorar la cualificación sobre la exposición del trabajo grupal, que la lucidez del profesor lo hará en su justa medida.
En este sentido la cualificación profesional es fundamental para la contratación y mutación laboral, aquellas personas que poseen una alta culalificación personal y dominio de idiomas, principalmente inglés, es más probable que encuentren trabajo en el exterior sin dificultad alguna y con muy alta remuneración, suelen ser puestos de alto nivel ejecutivo.
Sin embargo, para aquellos cuyo nivel es medio o bajo, la contratación en el exterior va a ser más dificultuosa y su salida al exterior es menor.
Pero donde radica la gran bolsa de emigración, es en aquellos colectivos cuyo nivel profesional y de renta, salvo excepciones, es muy bajo y además están en desempleo en sus países de origen, y la única alternativa que tienen es la emigración.
Es aconsejable, para evitar abusos y tráfico de personas, que se adopte una política transparente en aquellos países demendantes de mano de obra, realizando ofertas de empleo con contratos de trabajo de acuerdo con sus necesidades y con un control estricto en los países de origen.
No me atrevo a valorar la cualificación sobre la exposición del trabajo grupal, que la lucidez del profesor lo hará en su justa medida.
TRABAJO GRUPAL SOBRE CHINA
Pido mis disculpas, por error que desconozco, lo que debería figurar en este espacio es:
VEASE MI ENTRADA EN ESTE BLOG DE FECHA 10.10.07 " EL CRECIMIENTO ECONOMICO EN CHINA ", QUE SIRVE, A MI JUICIO, COMO COMPLEMENTO A LA EXCELENTE EXPOSICION GRUPAL.
Gracias y un saludo.
VEASE MI ENTRADA EN ESTE BLOG DE FECHA 10.10.07 " EL CRECIMIENTO ECONOMICO EN CHINA ", QUE SIRVE, A MI JUICIO, COMO COMPLEMENTO A LA EXCELENTE EXPOSICION GRUPAL.
Gracias y un saludo.
domingo, 13 de enero de 2008
TEORIA DEL DESARROLLO CAPITALISTA
Resumen del trabajo grupal consistente en la lectura de los ocho primeros capítulos del libro "Teoría del Desarrollo Capitalista" de M. Sweezy, realizado por el que suscribe y cinco compañeros más de la clase de "Sistema Económico Mundial", cuyos nombres figuran en el resumen del trabajo reflejado a continuación:
“Teoría del desarrollo capitalista”
Autor: M. Sweezy
Participantes:
Ezequiel Ignacio García-Municio de Lucas
Andrea Tomasetti
Luis Urda Rojo
Marta Jover
Carlos Flores Bautista
Antonio Fernández Gómez
Sistema Económico Mundial 2007/08
INTRODUCCION
La primera frase de la introducción (la sociedad es algo mas que un número de individuos) ya nos coloca en la teórica de que lo importante de la sociedad son las relaciones, y estas relaciones condicionan todos los demás hechos.
Con posterioridad, establece una unión entre la economía, los fines y los medios, para llegar a discutir si la economía es una ciencia social (relación hombre-hombre) o no (relación hombre-cosa) y el papel que desempeña el salario como contraprestación, para establecer si la relación del asalariado es justa o no.
CAP I: EL METODO DE MARX
1.1 La abstracción
La ortodoxia marxista se relaciona principalmente con el método.
El método utilizado es el abstracto-deductivo, avance desde lo general hasta lo concreto, eliminado lo superfluo
Lo primero es decidir de qué se hace abstracción y de que no se hace, cuestión muy controvertida entre los distintos economistas y que pone de relieve lo esencial que es elegir correctamente, para poder hacer el análisis posterior (abstracción).
Marx antes de hacer sus estudios económicos ya tenia una actitud sobre la economía política, predisponiéndose a que la existencia social de los hombres determinan su conciencia y no al revés, como pueda parecer a primera vista.
El cambio social esta ligado a la economía política, por lo que es fundamental conocer las leyes de la economía política, llegando a al conclusión que la historia es la sucesión de las luchas de clases, siendo los principales actores la burguesía y el proletariado, siendo estas relaciones el centro de la primera abstracción.
En la relación capital-trabajo surge un nuevo factor, como es lo que aporta cada una de las partes a la otra, siendo esto medido en forma de mercancía (todo lo que se cambia).
En el camino desde la abstracción pura hasta la realidad, las leyes sufren alguna mutación o modificación rectificadora.
1.2 Carácter histórico.
El método de Marx es histórico, siendo la realidad un proceso de cambios continuos, no elegidos por el hombre (lo único inmutable es la abstracción del movimiento), llegando mediante esto a que el mismo capitalismo es una fase existente, y por lo tanto transitoria.
Cáp. II: ELPROBLEMA DEL VALOR CUALITATIVO.
2.1 Introducción:
Mercancía es todo lo que se produce para el cambio más bien que para el uso del productor; el estudio de las mercancías es el estudio de la relación económica del cambio.
Producción simple de mercancías: una sociedad en la que cada productor posee sus propios medios de producción y satisface sus múltiples necesidades para el cambio con otros productores que se encuentran en situación similar.
Adam Smith:
La división del trabajo es el origen de todo aumento en la productividad; la base de la economía humana. Smith es incapaz de concebir la división del trabajo independientemente del cambio. Se liga el cambio a la divino del trabajo y se les muestra como las columnas unidas que sostienen la sociedad civilizada. La producción de mercancías es la forma universal e inevitable de la vida económica.
Marx:
Diferencia de criterio que distingue su economía política de la de Smith. Marx no niega la existencia de una relación entre la producción y la división del trabajo, pero no es firme y rígida. No se quita a la división del trabajo nada de la importancia que Smith le atribuyo pero se niega que la divino del trabajo este necesariamente ligada al cambio. La producción de mercancías no es la forma universal e inevitable de la vida económica sino más bien una de las formas posibles de la vida económica. La producción de mercancías es separada del reino de los fenómenos naturales y se convierte en materia valida de la investigación histórico-social. Las tareas de la economía política no son solo cuantitativas, sino también cualitativas. La relación cuantitativa entre productos oculta detrás de ella una relación específica históricamente condicionada, entre productores.
2.2 Valor de uso
Toda mercancía tiene un doble aspecto, el del valor de uso y el de valor de cambio. El valor de uso no da a una mercancía ningún carácter peculiar. Marx excluía el valor de uso de la esfera de investigación de la encomia política. Observa el requisito de que las categorías de la economía política deben ser categorías sociales, categorías que representen relaciones entre los hombres. Esto contrasta fuertemente con el punto de vista de la teoría económica moderna.
2.3 Valor de cambio
Poseyendo valor de cambio las unas en relación con las otras, las mercancías exhiben su característica única. El cambio es un método regular de realizar el propósito de la producción social, es solo en calidad de mercancías como los productos tienen valor de cambio. La relación cuantitativa entre cosas, que llamamos valor de cambio, es solo una forma exterior de la relación social entre los propietarios de mercancías. La relación de cambio como tal, es una expresión del hecho de que los productores individuales, trabajando aisladamente cada uno, trabajan en realidad los unos para los otros. Su trabajo tiene un carácter social que le es impreso por el acto de cambio. El concepto valor de cambio se aplica “solo cuando las mercancías están presentes en plural”, expresa una relación entre mercancías. Como valor, una mercancía es un rasgo de una forma histórica específica de sociedad que se distingue por dos características principales:
- División del trabajo desarrollada.
- Producción privada.
2.4 Trabajo y valor
El trabajo es considerado como el “valor que yace oculto detrás” del valor de cambio. El trabajo tiene dos aspectos, uno correspondiente al valor de uso y el otro al valor de la mercancía que produce. Sería incorrecto suponer que el trabajo útil es la única fuente del valor de uso, la naturaleza coopera tanto activa como pasivamente en el proceso de producción de valor de uso. Lo que el valor de uso es al valor en el caso de la mercancía, el trabajo útil es al trabajo abstracto en el caso de la actividad productiva.
2.5 Trabajo abstracto
El trabajo abstracto representado en el valor de las mercancías es un concepto que ocupa un lugar importante en el pensamiento de Marx. El trabajo abstracto es abstracto solo en el sentido completamente recto de que se pasan por alto todas las características especiales que distinguen una clase de trabajo de otra. Es equivalente de “trabajo en general”, es lo común a toda actividad humana productiva.
Marx partió de una idea básica de la escuela clásica, le dio expresión exacta y explícita, la desarrolló y la utilizó en el análisis de las relaciones sociales, a su propia manera original y aguda.
La reducción de todo trabajo a un común denominador, de modo que las unidades de trabajo puedan ser comparadas entre si y sustituidas una por otra, sumadas y restadas, y finalmente agrupadas para forma un conjunto social, no es una abstracción arbitraria. Es más bien una abstracción que pertenece a la esencia del capitalismo.
La sociedad capitalista se caracteriza por un grado de movilidad del trabajo, cambian de puesto los trabajadores, también la corriente de nuevos trabajadores que entra en el mercado de trabajo es rápidamente desviada de ocupaciones declinantes a otras en ascenso.
La reducción de todo trabajo a trabajo abstracto permite ver claramente, detrás de las formas especiales que el trabajo puede adoptar en un momento dad cualquiera, una suma de fuerza de trabajo social que es susceptible de transferencia de un uso a otro de acuerdo con la necesidad social, y de cuya magnitud y desarrollo depende en ultima instancia la capacidad productora de riqueza de la sociedad. La adopción de este punto de vista esta condicionada por la naturaleza misma de la producción capitalista, que lleva la movilidad del trabajo a un grado muy superior al de todas las formas anteriores de la sociedad.
2.6 La relación de lo cuantitativo con lo cualitativo en la teoría del valor.
La mercancía en cuestión tiene de común con todas las demás mercancías el hecho de absorber una parte del tota de la fuerza de trabajo disponible en la sociedad. Hace de la mercancía el punto de partida y la categoría central de la economía política de los tiempos modernos. Tanto la significación básica como las tareas principales de la teoría del valor cuantitativo son determinadas por el análisis cualitativo.
Para Marx el valor de cambio es solo la “forma fenomenal” bajo la cual se oculta el valor mismo.
El hecho de que una mercancía sea un valor significa que es trabajo abstracto materializado o que ha absorbido una parte del total de la actividad productora de riqueza de la sociedad.
Los dos conceptos “trabajo socialmente necesario” y “trabajo simple”, han estado al frente de casi todos los ataques a la economía política de Marx y pertenecen al aspecto cuantitativo de la teoría del valor.
CAP III: EL PROBLEMA DEL VALOR CUANTITATIVO
Desde siempre en toda sociedad es esencial que el trabajo se aplique a la producción y que los productos sean distribuidos entre los miembros de la sociedad, lo que cambia en el tiempo el modo de organizar la producción y la distribución.
Marx acentúa la necesidad de distribuir el trabajo social, la forma en que esta división opera en un estado en el que la interconexión del trabajo social se manifiesta en el cambio privado de los productos individuales del trabajo es el valor de cambio de estos productos.
El valor de cambio es un aspecto de las leyes que gobiernan la asignación de la actividad productiva en una sociedad productora de mercancías, y descubrir sus implicaciones es el fin de la teoría del valor cualitativo, y descubrir la naturaleza de estas leyes en términos cuantitativos el la tarea de la teoría del valor cuantitativo: el punto de partida tradicional de la moderna economía política porque el estudio del valor de cambio es solo el comienzo de la ciencia económica.
Las mercancías se cambian unas por otras en el mercado en ciertas proporciones precisas, que dependen de la cantidad de fuerza trabajo total disponible en la sociedad que absorben. Hay que introducir dos calificaciones obvias: 1)se habla de ‘trabajo socialmente necesario’ (la cantidad de trabajo que se requiere para producir un articulo en condiciones normales y con el grado medio de habilidad), 2) es claro que un trabajo mas calificado debe tener una mayor capacidad de producir valor (no hay diferencia si es porque el trabajador es mas calificado por una habilidad natural superior o por un mayor entrenamiento, porque en la practica las diferencias en pericia son el resultado de la unión de las dos cosas).
Marx dice que las diferentes proporciones en que diferentes clases de trabajo se reducen a trabajo no calificado como su norma, son establecidas por un proceso que tiene lugar a espaldas de los productores y, en consecuencia, parecen ser fijadas por la costumbre, los críticos sostienen que la reducción del trabajo calificado a trabajo simple implica el razonar en un circulo vicioso, la mayor capacidad del obrero mas calificado para crear valor se deduce del mayor valor de su producto, pero este es un razonamiento engañoso. Las diferencias en habilidad natural son mas o menos constantes, aun cuando los obreros sean transferidos de una línea de producción a otra, las calidades que hacen a un buen obrero no difieren mucho de una ocupación a la otra, la aceptación de este echo es bastante para establecer la conmensurabilidad del trabajo simple y de ese calificado.
Otra cosa importante es ver bajo que condiciones las proporciones del cambio corresponderían exactamente a las proporciones del tiempo del trabajo, porque es natural que lo que es comúnmente el producto de dos días de trabajo, valga el doble de lo que es comúnmente el producto del trabajo de un día.
Adam Smith trae el ejemplo de una nación de cazadores a los que matar un castor cuesta dos veces el trabajo que cuesta matar un ciervo, entonces un castor debería valer dos ciervos, así los cazadores de castor no hallaran incentivos en dedicarse a la caza de ciervo y viceversa, porque esta es la proporción de cambio que puede conservar el equilibrio, porque la oferta y la demanda estarán equilibradas solo cuando el precio de cada mercancía sea proporcional al tiempo de trabajo requerido para producirla. A la inversa se establecerán precios proporcionales a los tiempos de trabajo solo en caso de que las fuerzas competidoras de la oferta y la demanda puedan trabajar libremente: el ‘mecanismo equilibrador’ de O. Lange que dice que la oferta y la demanda son un mecanismo destinado a eliminar las desviaciones entre los precios del mercado y los valores, así que el precio de mercado de una mercancía coincida con su valor real.
Pero el problema del valor cuantitativo es más amplio que la mera cuestión de las proporciones del cambio, porque no se puede separar ya de las demandas del consumidor. Si se desea conocer tanto la proporción del cambio como la distribución del trabajo, es necesario contar con dos clases de información: 1) la información sobre el costo relativo en trabajo, 2) la información sobre la intensidad relativa de la demanda, es el único modo para lograr determinar el equilibrio económico general de la sociedad, porque hay que definir el estado de cosas que, si no ocurre ningún cambio en las condiciones básicas, persistirá, y es general porque no solo establece el valor relativo de los productos, sino que también establece las cantidades de producto producidas y la distribución de la fuerza de trabajo de la sociedad.
Marx especifica también que, bajo el capitalismo la demanda efectiva es solo parcialmente una cuestión relativa a las necesidades de los consumidores, la cuestión básica es la distribución del ingreso, que a su vez es un reflejo de las relaciones de producción, porque la ‘demanda social’ está esencialmente condicionada por las relaciones mutuas de las distintas clases económicas y sus posiciones económicas relativas 1) por la proporción entre la plusvalía total y los salarios, 2) por la división de la plusvalía en sus diversas partes.
Marx dice también que parecería que existe del lado de la demanda una magnitud precisa de necesidades sociales, que requiere una cantidad precisa de ciertos artículos en el mercado, pero la cantidad es muy elástica y cambiante, los limites dentro de los cuales la necesidad de mercancías en el mercado, la demanda, defiere cuantitativamente de la necesidad social real varia con respecto a las diversas mercancías, la diferencia entre la cantidad de mercancías que se exige y aquella cantidad que se exigiría si los precios de las mercancías en dinero fueran diferentes.
Entonces hay que aceptar que la demande del mercado está dominada por la distribución del ingreso y que las necesidades de los consumidores son elementos reactivos de la vida social, son un reflejo del desarrollo técnico y organizacional de la sociedad, y no viceversa.
Shumpeter hace notar también que los gustos de los consumidores no tendrán probablemente importancia a menos que ocasionen transferencias en el ingreso real: en los ciclos económicos y las tendencias de desarrollo del sistema capitalista la teoría de la opción de los consumidores es poco o nada pertinente.
El paso siguiente es advertir lo que Marx llamaba la ley del valor, que resume las fuerzas actuantes (que incluyen la productividad del trabajo, la norma de las necesidades sociales y las fuerzas equilibradoras de la oferta y la demanda), en una sociedad productora de mercancías que regula las proporciones de cambio de mercancías, la cantidad producida de cada una y la asignación de la fuerza de trabajo a las diferentes ramas de la producción, con la condición que sea una sociedad de productores privados que satisfagan sus necesidades por el cambio entre ellos.
La ley del valor es una teoría de equilibrio, con referencia a la producción simple de mercancías y adaptada después al capitalismo, y una de sus principales funciones es la de aclarar que aun una sociedad productora de mercancías existe un orden, también si nadie decide como asignar el esfuerzo productivo o cuanto se debe producir, pero todo se resuelve solo, y la ley del valor explica como sucede todo esto, y en la ley del valor se basa la teoría del concepto de ‘precio de producción’, y siendo el precio la expresión monetaria del valor, los precios de producción son modificaciones de los valores.
Los precios de producción se derivan de los valores de acuerdo con ciertas reglas generales, las desviaciones no son arbitrarias ni carecen de explicación, pero los elementos de monopolio dificultan el funcionamiento de la ley del valor como reguladora de las relaciones cuantitativas de producción y de cambio, el control de la oferta por el monopolista le permite aprovecharse de las condiciones de la demanda, las discrepancias entre el precio y el valor no están sometidas a ninguna regla, pero hay que aclarar que las relaciones de valor cuantitativo son perturbadas por el monopolio, pero las relaciones de valor cualitativo no.
Por esto, aun bajo condiciones de monopolio, podemos seguir midiendo y comparando mercancías y conjuntos de mercancías en términos de unidades de tiempo de trabajo, a pesar del hecho de que las relaciones cuantitativas precisas implicadas en la ley del valor han dejado de ser validas.
TEMA IV “PLUSVALÍA Y CAPITALISMO”
Es importante diferenciar entre la producción de mercancías en general con el capitalismo.
La producción simple de mercancías consiste en que cada productor posee y trabaja con sus propios medios de producción. Opera con el sistema M-D-M. Empieza con Mercancías, las convierte en Dinero, y una vez en Mercancías. Las Mercancías constituyen el principio y el final de la transacción.
En el capitalismo la propiedad de los medios de producción corresponde a un conjunto de individuos, mientras que otro realiza el trabajo- aquí tanto los medios de producción como la fuerza del trabajo, son mercancías, es decir, unos y otros son objetos de cambio. Opera con el sistema D-M-D´. El Capitalista se presenta en el mercado con Dinero, compra Mercancías (fuerza de trabajo y medios de producción), y después de un proceso de producción, vuelve al mercado con un producto que convierte en Dinero. Aquí el dinero es el principio y final.
Ante lo expuesto se puede deducir que la compra y venta de la fuerza de trabajo es la diferencia específica del Capitalismo.
El origen de la plusvalía:
La plusvalía para Marx está en la diferencia entre D´y D.
El Capitalista compra la fuerza de trabajo en su valor, paga al obrero como salario una suma correspondiente al valor de los medios de subsistencia del obrero.
Con su trabajo de un día el trabajador produce más que los medios de subsistencia de un día, en consecuencia, la jornada de trabajo puede dividirse en dos partes, trabajo necesario y trabajo excedente, el producto del trabajo necesario va a poder del obrero en forma de salario, mientras que el capitalista se apropia el producto del trabajo excedente, en forma de plusvalía (diferencia que existe entre el valor de la fuerza de trabajo y el valor de la mercancía que el trabajador produce)
Los componentes del valor
El valor de cualquier mercancía se puede dividir en tres formas: Capital constante (valores de los materiales y la maquinaria usados), capital variable (salarios) y Plusvalía.
La tasa de la plusvalía
Se define como la proporción de la plusvalía con respecto al capital variable.
P/V. La tasa de la plusvalía Marx la llama la tasa de explotación, la proporción de trabajo excedente con respecto al trabajo necesario.
La composición del capital
Es la proporción del capital constante con respecto al capital total.
C/C + V = O
La tasa de la ganancia
Es la proporción de la plusvalía con respecto al desembolso total de capital, se designa con una g. (P/c +v) = g
TEMA V LA ACUMULACIÓN Y EL EJÉRCITO DE RESERVA
5.1 Reproducción simple.
Se refiere a un sistema capitalista que conserva indefinidamente las mismas dimensiones y las mismas proporciones entre sus diversas partes. Para esto es necesario que los capitalistas repongan cada año el capital gastado y empleen toda su plusvalía en el consumo; y que los obreros gasten todo su salario en el consumo.
La condición básica de la reproducción simple es que el valor del capital constante usado en la rama de artículos de consumo debe ser igual al valor de las mercancías consumidas por los obreros y capitalistas dedicados a producir medios de producción.
La producción se divide en dos categorías:
Producción total de medios de producción y producción total de artículos de consumo, que dan lugar a la suma de la oferta social de mercancías y el ingreso del capitalista en medios de producción y consumo (plusvalía) y el ingreso del trabajor- salario-, que constituyen la demanda total de mercancías.
La suma de la oferta y la suma de la demanda deben estar equilibradas.
El plan de reproducción es en esencia un expediente para mostrar la estructura de las ofertas y demandas en la economía capitalista.
5.2 Las raíces de la acumulación.
El fin del capitalista es “Acumular” –como lo expresaba Marx- es conquistar el mundo de la riqueza social, acrecentar la masa de seres humanos explotados por él, y de este modo extender el predominio directo e indirecto del capitalista”
Marx señala en su teoría del consumo de los capitalistas, que sus gastos crecen con su acumulación.
De lo cual se deduce que los capitalistas quieren a la vez acumular y consumir.
5.3 La acumulación y el valor de la fuerza de trabajo planteamiento del problema
La acumulación implica un aumento en la demanda de fuerza de trabajo. Ahora bien cuando aumenta la demanda de una mercancía cualquiera, su precio sube asimismo; y esto lleva consigo una desviación del precio respecto del valor.
La acumulación eleva la demanda de fuerza de trabajo por lo que se rompe la igualdad entre los salarios y el valor de la fuerza de trabajo.
5.4 La solución de Marx: el ejército de reserva del trabajo
¿Qué es lo que mantiene los salarios iguales al valor de la fuerza de trabajo?
Marx lo soluciona a través del “ejército de reserva del trabajo” que consiste en obreros desocupados que, mediante su competencia activa en el mercado de trabajo, ejercen una presión constante, hacia abajo, en el nivel del salario.
El ejército de reserva se recluta principalmente entre aquellos que han sido desplazados por la maquinaria. Al introducir maquinaria, el capitalista lo que persigue es provocar desempleo, que a su vez actúa sobre el nivel del salario mismo. De aquí se deduce que cuanto más fuerte sea la tendencia de los salarios a subir, más fuerte será también la presión del ejército de reserva para contrarrestarla, y viceversa.
En la fase de prosperidad del ciclo económico el Empleo Industrial gana a expensas del Ejército de Reserva; por otra parte, a la crisis y la depresión corresponde una contracción del Empleo Industrial mientras el Ejército de Reserva crece.
5.5 La naturaleza del proceso capitalista
La acumulación por los capitalistas cesará del todo cuando sus ganancias sean tan bajas que no representen para ellos una compensación adecuada por las molestias y los riesgos que necesariamente afrontan empleando su capital en forma productiva.
La teoría clásica considera a los métodos de producción como dependientes de invenciones y descubrimientos fortuitos, en la teoría de Marx se convierten en condición necesaria para prolongar la existencia de la producción capitalista. Pues es por medio de las innovaciones tecnológicas para economizar trabajo, como se recluta el ejército de reserva, y sólo por la existencia continua del ejército de reserva puede sobrevivir la plusvalía y la clase que ella sostiene.
Cáp. VI “LA TENDENCIA DESCENDESTE DE LA TASA DE GANANCIA”
6.1 La formulación de la ley por Marx
Si partimos de la base que la productividad del trabajo crece y que la proporción del desembolso del capitalista en materiales y maquinaria con respecto al desembolso total, también asciende sostenidamente, de ello derivó Marx su famosa ley del epígrafe (subrayada):
g = p´ (1- o )
g = tasa de ganancia
P´ = tasa de plusvalía constante
o = composición orgánica del capital (proporción del desembolso del capitalista en materiales y maquinaria con respecto al desembolso total)
Si sube o tiene que bajar g, y como hemos establecido que o tiene una tendencia ascendente en el curso del desarrollo capitalista, g tiene una tendencia a caer.
Marx trataba de demostrar que ciertos obstáculos internos se oponían al desarrollo indefinido de la producción capitalista, por una parte, una composición orgánica creciente del capital es la expresión de la creciente productividad del trabajo, y por otra parte, la tasa descendente de la ganancia que la acompaña tiene que cerrar al fin los cauces de la iniciativa capitalista.
6.2 Las causas contrarrestantes
Marx enumera seis causas que contrarrestan y anulan la ley general enunciada en el punto anterior, dejándole solamente el carácter de una tendencia, la sexta se relaciona con la forma de calcular la tasa de ganancia, y no la vamos a examinar aquí, las otras pueden ser clasificadas según que su efecto sea mantener baja la composición orgánica del capital (o) o elevar la tasa de plusvalía (P´).
En la primera clasificación entra el abaratamiento de los elementos del capital constante, mientras que en la segunda encontramos el aumento de la intensidad de explotación, la depresión de los salarios más abajo de su valor y la sobrepoblación relativa. Una de las causas, el comercio exterior entra en ambas clasificaciones, veamos como operan cada una de ellas:
Abaratamiento de los elementos del capital constante
El uso creciente de maquinaria, elevando la productividad del trabajo, disminuye el valor por unidad del capital constante. El valor del capital constante, aunque crece sin cesar, no puede hacerlo en la misma proporción que el volumen material de los medios de producción que pone en movimiento la misma cantidad de fuerza de trabajo.
Aumento de la intensidad de explotación
La prolongación de la jornada de trabajo eleva directamente la tasa de plusvalía, aumenta el trabajo excedente sin afectar al trabajo necesario. El acelerar y estirar aumenta la tasa de plusvalía haciendo entrar el trabajo necesario en un tiempo más corto, dejando una parte de la jornada de trabajo no alterada para el trabajo excedente, y el efecto en cualquiera de los casos es elevar la tasa de ganancia. Estos métodos no están necesariamente relacionados con una composición orgánica ascendente del capital.
Depresión de los salarios más debajo de su valor
La reducción salarial la menciona Marx de paso, puesto que él se apoya en la suposición general de que los precios y los salarios están determinados por el mercado, suposición que rechaza la posibilidad de una política agresiva por parte de los capitalistas.
Sobrepoblación relativa
El aumento creciente del uso de la maquinaria deja sin trabajo a cierto número de trabajadores, creando así la sobrepoblación relativa o ejército de reserva, que trae consigo una bajada de salarios y se eleva por este medio la tasa de plusvalía.
Comercio exterior
A veces las materias primas y los artículos necesarios para el consumo, se adquieren en el exterior porque resultan más baratos que producirlos en el país. Esto hace que se abarate los elementos del capital constante, y en parte los artículos necesarios para la vida por los cuales se cambia el capital variable, ello tiende a elevar la tasa de la ganancia elevando la tasa de plusvalía y reduciendo el valor del capital constante, este factor entra, por consiguiente, en las dos clasificaciones de las causa contrarrestantes que hemos mencionado.
6.3 Una crítica a la ley
Es correcto suponer una composición orgánica ascendente del capital, pero ¿se justifica, sin embargo, el suponer al mismo tiempo una tasa constante de la plusvalía?, es preciso tener claridad sobre las implicaciones de esta última suposición. Una composición orgánica ascendente del capital va unida con la creciente productividad del trabajo. Si la tasa de la plusvalía permanece invariable, esto significa que se elevan los salarios reales proporcionalmente al aumento de la productividad en el trabajo, supongamos que la productividad del trabajo se duplica, entonces, puesto que una tasa de la plusvalía inalterable significa que el obrero trabaja la misma cantidad de tiempo para sí, y la misma cantidad para el capitalista, que antes, resulta que la producción total física representada por el salario como la representada por la plusvalía se han duplicado también, sin embargo, hay dudas razonables para que el resultado de esta suposición sea el correcto.
El trabajo pasado (el que está en paro), en forma de capital constante, mantiene una relación de competencia con el trabajo viviente (el trabajo actual) y frena las demandas de este último por la ley del mercado, y la suposición d Marx de una tasa constante de la plusvalía con la productividad ascendente del trabajo parece pasar por alto este efecto, aunque Marx trata este problema incluyendo la superpoblación relativa, sería mejor reconocer desde el principio que la productividad ascendente tiende a llevar consigo una tasa más alta de plusvalía.
Difícilmente se justifica la suposición de Marx de una tasa constante de la plusvalía coexistiendo con una composición orgánica ascendente del capital, porque un ascenso de esta última significa necesariamente un aumento de la productividad del trabajo, y si se supone que tanto la composición orgánica del capital como la tasa de plusvalía son variables, como creemos que debería hacerse, entonces la dirección en que la tasa de la ganancia variará se hace indeterminada.
Es seguramente verdad que la cantidad de maquinaria y materiales por obrero ha mostrado una tendencia a crecer muy rápidamente, pero la composición orgánica del capital es una expresión de valor; y debido a la productividad del trabajo en ascenso constante, el crecimiento en el volumen de maquinaria y materiales por obrero no debe considerarse como un índice del cambio en la composición orgánica del capital.
No hay ninguna suposición general de que los cambios en la composición orgánica del capital serán relativamente tan superiores a los cambios en la tasa de plusvalía que los primeros dominarán los movimientos en la tasa de ganancia; por el contrario parecería que debemos considerar las dos variables como de importancia aproximadamente coordinada; por esta razón la formulación de la Ley por Marx no es muy convincente, y tampoco lo es los intentos hechos para demostrar que una composición orgánica ascendente del capital debe ser acompañada por una tasa ascendente de la ganancia. Tras de la composición orgánica ascendente del capital está el proceso de acumulación de capital, y es aquí donde debemos buscar las fuerzas que tienden a deprimir la tasa de la ganancia.
Además de las fuerzas estudiadas que influyen en la tasa de ganancia, existen otras que las podemos clasificar en aquellas que tienden a deprimirla, y aquellas otras que tienden a elevarla:
Fuerzas tendentes a deprimir la tasa de ganancia
1.- Los sindicatos
2.- La acción del Estado en beneficio de los trabajadores
Fuerzas tendentes a elevar la tasa de ganancia
1.- Las organizaciones patronales
2.- La exportación de capital
3.- La formación de monopolios
4.- La acción del estado en beneficio del capital
Cáp. VIII “LA NATURALEZA DE LAS CRISIS CAPITALISTAS”
El problema de las crisis, aunque persistente en las obras de Marx, nunca fue tratado, analizado por él. Esto es debido a la complejidad que encierran estos “fenómenos”, frutos de complejas fuerzas económicas, sin posibilidad de ser estudiados por Marx partiendo de los sistemas “tipo” de los que partía en su obra “El Capital”, aunque sí apareciesen todos los aspectos del problema de la crisis en los niveles de abstracción más altos, siendo una cuestión de tiempo el que Marx no se ocupase de las crisis.
La producción simple de mercancías y la crisis
En sociedades avanzadas más allá del trueque ocasional, los intercambios se producen (mercancía – dinero – mercancía), pudiéndose producir estos intercambios en diferentes momentos de espacio y tiempo.
La utilización de la moneda permite al productor vender su producto a su término y comprar a su satisfacción lo que le hace falta.
Este contexto económico (organización de la producción por medio del cambio privado) puede generar una gran crisis, en la que aparecen existencias de mercancías invendibles y necesidades insatisfechas en el momento en el que existan circunstancias que lleven a un productor (A), a interrumpir el proceso de cambio de sus propios productos por los productos de otros. Esta “crisis”, sería una crisis de sobreproducción.
Las razones que llevan a este comportamiento, por el cual los productores siguen esta conducta en una sociedad de producción simple pueden ser por un desastre natural, la guerra o algún otro acontecimiento catastrófico.
Sobre este origen de crisis, encontramos un buen ejemplo en el “atesoramiento”, basado en la sed de oro del avaro, el cual se da más en las condiciones próximas a la producción simple de mercancías que en sociedades más avanzadas.
No parece fácil que un atesoramiento pueda provocar una crisis violenta y súbita tipo a las de tiempos más modernos.
Dado que las mercancías en sistema de producción simple de mercancías circulan acorde (Mercancía – Dinero – Mercancía), lleva implícito las posibilidades de una crisis, pero también se trata de producción para el consumo, y dado que el consumo es un proceso continuo, es menos temible “la crisis”.
La Ley de Say
Se ha apreciado en los economistas clásicos una falta de perspectiva histórica al no distinguir entre producción simple de mercancías y producción capitalista. Se aplicaban teoremas a la producción capitalista, extrapolando los teoremas del modelo de producción simple de mercancías.
Un ejemplo claro nos lo ofrece un dicho famosos en la literatura económica “Ley de mercados de Say”, que toma su nombre de Jean Baptiste Say, discípulo de Adam Smith.
Esta Ley indica que la circulación de (Mercancía – Dinero – Mercancía), no puede detenerse ya que una venta sigue a una compra por igual cantidad. Esta teoría implica que nunca pueda darse una crisis ni una sobreproducción.
Si bien esta teoría parece cumplirse por lo general en los modelos de producción simple de mercancías, en los modelos en los que se dan otras circunstancias cualesquiera, no es así.
El Capitalismo y la crisis
La fórmula de circulación (Mercancía – Dinero – Mercancía), característica de la producción simple de mercancías, se convierte bajo el capitalismo en (Dinero – Mercancía – Dinero), desde el punto de vista de la circulación, ésta en la diferencia fundamental entre ambas.
En el modelo de producción simple de mercancías, lo que en realidad ocurre en el proceso de circulación (M – D – M), es que en el propósito del cambio lo que se da es la adquisición de valor de uso y no el incremento del valor de cambio.
Bajo el capitalismo, la forma de circulación es totalmente diferente. (D – M – D). El capitalista inicia su carrera con dinero lanzándolo a la circulación a cambio de fuerza de trabajo y medios de producción. Cuando este proceso ha concluido, el capitalista vuelve a aparecer en el mercado con mercancías que transforma de nuevo en dinero. La D inicial y la D final, representan valor de cambio.
Así, para el capitalista la base objetiva de la expansión del valor, se convierte en un propósito subjetivo, convirtiéndose en un único móvil la apropiación de más y más riqueza en abstracto.
La diferencia esencial entre la figura del “avaro” y el capitalista es que a uno le satisface retirar el dinero de la circulación, mientras que el otro devuelve constantemente su dinero a la circulación, cambiando el carácter del proceso de circulación.
Esto explica que el capitalismo es producción para obtener ganancia y es esto también lo que le hace susceptible a las crisis y a la sobreproducción.
La diferencia de motivos y de conducta entre el capitalista y el obrero, proviene de la diferencia (M – D – M) y (D – M – D), de las circunstancias objetivas diferentes en que cada quién está colocado.
La economía política ortodoxa ha caído en los errores tanto de suponer que bajo el capitalismo cada uno es impulsado por el deseo de obtener ganancias, o que cada uno se interesa solamente por los valores de uso.
Centrando la lectura la crisis en la relación D – M – D conociendo que el capitalista se concreta en incrementar D.
Hay que tener en cuenta que la crisis, o su posibilidad formal, no diferencian entre la producción simple de mercancías y el capitalismo. Todo lo aplicado a la producción simple de mercancías, aplica también al capitalismo, cualquier interrupción en el proceso de circulación, puede iniciar una contracción en el proceso de la circulación, el cual, dará origen al fenómeno de la sobreproducción, reflejándose en el descenso de la propia producción.
Dado que el incremento de “Dinero” es vital para que el capitalista considere la conveniencia de lanzar su “Dinero” a la circulación, el propio incremento de “Dinero” es el talón de Aquiles del capitalismo.
Así el texto analiza dos posibles casos que muestro gráficamente:
1)
Los capitalistas retirarán su capital, se reducirá la circulación y se iniciará una crisis seguida de sobreproducción.
2)
En este caso, pueden darse razones para que los capitalistas reduzcan sus operaciones lo bastante como para provocar una crisis.
Las crisis pueden sobrevenir solamente por el hecho de que la tasa de ganancia descienda más allá de su nivel ordinario, o simplemente porque se haya reasignado una nueva y más baja tasa, no siendo necesario que dicha tasa deba desaparecer o volverse negativa para que surja una crisis.
Otra cuestión a plantear es el descubrimiento de los teóricos modernos a un nivel de abstracción más bajo que Marx. Para ellos, el capitalista se divide en dos secciones.
Empresario que dirigen y organizan los procesos de la producción.
Poseedores de capital en dinero.
Así planteado, los empresarios poseedores de dinero, se lo prestan a un tipo alto de interés a sí mismos. Esto implica que los capitalistas antes de prestar a un tipo inferior, prefieren acumular los capitales.
El efecto de éstos con respecto a los capitalistas empresarios, es el mismo. Los capitalistas al no prestar a tipos de interés inferiores, provocan el mismo fenómeno que se provoca con la negativa de los capitalistas industriales a producir a tasas inferiores de ganancias de las esperadas.
Se ha establecido que la tendencia de la tasa de ganancia es descendente en términos generales. Este cálculo se hizo suponiendo que todas las mercancías se vendían en sus valores de equilibrio.
Si se abandona la posición de que todas las mercancías se vendan en sus valores de equilibrio, aparece otra posible causa de descenso en la lucratividad. Los capitalistas pueden verse imposibilitados para vender las mercancías en sus valores, lo que provocaría la crisis.
“Teoría del desarrollo capitalista”
Autor: M. Sweezy
Participantes:
Ezequiel Ignacio García-Municio de Lucas
Andrea Tomasetti
Luis Urda Rojo
Marta Jover
Carlos Flores Bautista
Antonio Fernández Gómez
Sistema Económico Mundial 2007/08
INTRODUCCION
La primera frase de la introducción (la sociedad es algo mas que un número de individuos) ya nos coloca en la teórica de que lo importante de la sociedad son las relaciones, y estas relaciones condicionan todos los demás hechos.
Con posterioridad, establece una unión entre la economía, los fines y los medios, para llegar a discutir si la economía es una ciencia social (relación hombre-hombre) o no (relación hombre-cosa) y el papel que desempeña el salario como contraprestación, para establecer si la relación del asalariado es justa o no.
CAP I: EL METODO DE MARX
1.1 La abstracción
La ortodoxia marxista se relaciona principalmente con el método.
El método utilizado es el abstracto-deductivo, avance desde lo general hasta lo concreto, eliminado lo superfluo
Lo primero es decidir de qué se hace abstracción y de que no se hace, cuestión muy controvertida entre los distintos economistas y que pone de relieve lo esencial que es elegir correctamente, para poder hacer el análisis posterior (abstracción).
Marx antes de hacer sus estudios económicos ya tenia una actitud sobre la economía política, predisponiéndose a que la existencia social de los hombres determinan su conciencia y no al revés, como pueda parecer a primera vista.
El cambio social esta ligado a la economía política, por lo que es fundamental conocer las leyes de la economía política, llegando a al conclusión que la historia es la sucesión de las luchas de clases, siendo los principales actores la burguesía y el proletariado, siendo estas relaciones el centro de la primera abstracción.
En la relación capital-trabajo surge un nuevo factor, como es lo que aporta cada una de las partes a la otra, siendo esto medido en forma de mercancía (todo lo que se cambia).
En el camino desde la abstracción pura hasta la realidad, las leyes sufren alguna mutación o modificación rectificadora.
1.2 Carácter histórico.
El método de Marx es histórico, siendo la realidad un proceso de cambios continuos, no elegidos por el hombre (lo único inmutable es la abstracción del movimiento), llegando mediante esto a que el mismo capitalismo es una fase existente, y por lo tanto transitoria.
Cáp. II: ELPROBLEMA DEL VALOR CUALITATIVO.
2.1 Introducción:
Mercancía es todo lo que se produce para el cambio más bien que para el uso del productor; el estudio de las mercancías es el estudio de la relación económica del cambio.
Producción simple de mercancías: una sociedad en la que cada productor posee sus propios medios de producción y satisface sus múltiples necesidades para el cambio con otros productores que se encuentran en situación similar.
Adam Smith:
La división del trabajo es el origen de todo aumento en la productividad; la base de la economía humana. Smith es incapaz de concebir la división del trabajo independientemente del cambio. Se liga el cambio a la divino del trabajo y se les muestra como las columnas unidas que sostienen la sociedad civilizada. La producción de mercancías es la forma universal e inevitable de la vida económica.
Marx:
Diferencia de criterio que distingue su economía política de la de Smith. Marx no niega la existencia de una relación entre la producción y la división del trabajo, pero no es firme y rígida. No se quita a la división del trabajo nada de la importancia que Smith le atribuyo pero se niega que la divino del trabajo este necesariamente ligada al cambio. La producción de mercancías no es la forma universal e inevitable de la vida económica sino más bien una de las formas posibles de la vida económica. La producción de mercancías es separada del reino de los fenómenos naturales y se convierte en materia valida de la investigación histórico-social. Las tareas de la economía política no son solo cuantitativas, sino también cualitativas. La relación cuantitativa entre productos oculta detrás de ella una relación específica históricamente condicionada, entre productores.
2.2 Valor de uso
Toda mercancía tiene un doble aspecto, el del valor de uso y el de valor de cambio. El valor de uso no da a una mercancía ningún carácter peculiar. Marx excluía el valor de uso de la esfera de investigación de la encomia política. Observa el requisito de que las categorías de la economía política deben ser categorías sociales, categorías que representen relaciones entre los hombres. Esto contrasta fuertemente con el punto de vista de la teoría económica moderna.
2.3 Valor de cambio
Poseyendo valor de cambio las unas en relación con las otras, las mercancías exhiben su característica única. El cambio es un método regular de realizar el propósito de la producción social, es solo en calidad de mercancías como los productos tienen valor de cambio. La relación cuantitativa entre cosas, que llamamos valor de cambio, es solo una forma exterior de la relación social entre los propietarios de mercancías. La relación de cambio como tal, es una expresión del hecho de que los productores individuales, trabajando aisladamente cada uno, trabajan en realidad los unos para los otros. Su trabajo tiene un carácter social que le es impreso por el acto de cambio. El concepto valor de cambio se aplica “solo cuando las mercancías están presentes en plural”, expresa una relación entre mercancías. Como valor, una mercancía es un rasgo de una forma histórica específica de sociedad que se distingue por dos características principales:
- División del trabajo desarrollada.
- Producción privada.
2.4 Trabajo y valor
El trabajo es considerado como el “valor que yace oculto detrás” del valor de cambio. El trabajo tiene dos aspectos, uno correspondiente al valor de uso y el otro al valor de la mercancía que produce. Sería incorrecto suponer que el trabajo útil es la única fuente del valor de uso, la naturaleza coopera tanto activa como pasivamente en el proceso de producción de valor de uso. Lo que el valor de uso es al valor en el caso de la mercancía, el trabajo útil es al trabajo abstracto en el caso de la actividad productiva.
2.5 Trabajo abstracto
El trabajo abstracto representado en el valor de las mercancías es un concepto que ocupa un lugar importante en el pensamiento de Marx. El trabajo abstracto es abstracto solo en el sentido completamente recto de que se pasan por alto todas las características especiales que distinguen una clase de trabajo de otra. Es equivalente de “trabajo en general”, es lo común a toda actividad humana productiva.
Marx partió de una idea básica de la escuela clásica, le dio expresión exacta y explícita, la desarrolló y la utilizó en el análisis de las relaciones sociales, a su propia manera original y aguda.
La reducción de todo trabajo a un común denominador, de modo que las unidades de trabajo puedan ser comparadas entre si y sustituidas una por otra, sumadas y restadas, y finalmente agrupadas para forma un conjunto social, no es una abstracción arbitraria. Es más bien una abstracción que pertenece a la esencia del capitalismo.
La sociedad capitalista se caracteriza por un grado de movilidad del trabajo, cambian de puesto los trabajadores, también la corriente de nuevos trabajadores que entra en el mercado de trabajo es rápidamente desviada de ocupaciones declinantes a otras en ascenso.
La reducción de todo trabajo a trabajo abstracto permite ver claramente, detrás de las formas especiales que el trabajo puede adoptar en un momento dad cualquiera, una suma de fuerza de trabajo social que es susceptible de transferencia de un uso a otro de acuerdo con la necesidad social, y de cuya magnitud y desarrollo depende en ultima instancia la capacidad productora de riqueza de la sociedad. La adopción de este punto de vista esta condicionada por la naturaleza misma de la producción capitalista, que lleva la movilidad del trabajo a un grado muy superior al de todas las formas anteriores de la sociedad.
2.6 La relación de lo cuantitativo con lo cualitativo en la teoría del valor.
La mercancía en cuestión tiene de común con todas las demás mercancías el hecho de absorber una parte del tota de la fuerza de trabajo disponible en la sociedad. Hace de la mercancía el punto de partida y la categoría central de la economía política de los tiempos modernos. Tanto la significación básica como las tareas principales de la teoría del valor cuantitativo son determinadas por el análisis cualitativo.
Para Marx el valor de cambio es solo la “forma fenomenal” bajo la cual se oculta el valor mismo.
El hecho de que una mercancía sea un valor significa que es trabajo abstracto materializado o que ha absorbido una parte del total de la actividad productora de riqueza de la sociedad.
Los dos conceptos “trabajo socialmente necesario” y “trabajo simple”, han estado al frente de casi todos los ataques a la economía política de Marx y pertenecen al aspecto cuantitativo de la teoría del valor.
CAP III: EL PROBLEMA DEL VALOR CUANTITATIVO
Desde siempre en toda sociedad es esencial que el trabajo se aplique a la producción y que los productos sean distribuidos entre los miembros de la sociedad, lo que cambia en el tiempo el modo de organizar la producción y la distribución.
Marx acentúa la necesidad de distribuir el trabajo social, la forma en que esta división opera en un estado en el que la interconexión del trabajo social se manifiesta en el cambio privado de los productos individuales del trabajo es el valor de cambio de estos productos.
El valor de cambio es un aspecto de las leyes que gobiernan la asignación de la actividad productiva en una sociedad productora de mercancías, y descubrir sus implicaciones es el fin de la teoría del valor cualitativo, y descubrir la naturaleza de estas leyes en términos cuantitativos el la tarea de la teoría del valor cuantitativo: el punto de partida tradicional de la moderna economía política porque el estudio del valor de cambio es solo el comienzo de la ciencia económica.
Las mercancías se cambian unas por otras en el mercado en ciertas proporciones precisas, que dependen de la cantidad de fuerza trabajo total disponible en la sociedad que absorben. Hay que introducir dos calificaciones obvias: 1)se habla de ‘trabajo socialmente necesario’ (la cantidad de trabajo que se requiere para producir un articulo en condiciones normales y con el grado medio de habilidad), 2) es claro que un trabajo mas calificado debe tener una mayor capacidad de producir valor (no hay diferencia si es porque el trabajador es mas calificado por una habilidad natural superior o por un mayor entrenamiento, porque en la practica las diferencias en pericia son el resultado de la unión de las dos cosas).
Marx dice que las diferentes proporciones en que diferentes clases de trabajo se reducen a trabajo no calificado como su norma, son establecidas por un proceso que tiene lugar a espaldas de los productores y, en consecuencia, parecen ser fijadas por la costumbre, los críticos sostienen que la reducción del trabajo calificado a trabajo simple implica el razonar en un circulo vicioso, la mayor capacidad del obrero mas calificado para crear valor se deduce del mayor valor de su producto, pero este es un razonamiento engañoso. Las diferencias en habilidad natural son mas o menos constantes, aun cuando los obreros sean transferidos de una línea de producción a otra, las calidades que hacen a un buen obrero no difieren mucho de una ocupación a la otra, la aceptación de este echo es bastante para establecer la conmensurabilidad del trabajo simple y de ese calificado.
Otra cosa importante es ver bajo que condiciones las proporciones del cambio corresponderían exactamente a las proporciones del tiempo del trabajo, porque es natural que lo que es comúnmente el producto de dos días de trabajo, valga el doble de lo que es comúnmente el producto del trabajo de un día.
Adam Smith trae el ejemplo de una nación de cazadores a los que matar un castor cuesta dos veces el trabajo que cuesta matar un ciervo, entonces un castor debería valer dos ciervos, así los cazadores de castor no hallaran incentivos en dedicarse a la caza de ciervo y viceversa, porque esta es la proporción de cambio que puede conservar el equilibrio, porque la oferta y la demanda estarán equilibradas solo cuando el precio de cada mercancía sea proporcional al tiempo de trabajo requerido para producirla. A la inversa se establecerán precios proporcionales a los tiempos de trabajo solo en caso de que las fuerzas competidoras de la oferta y la demanda puedan trabajar libremente: el ‘mecanismo equilibrador’ de O. Lange que dice que la oferta y la demanda son un mecanismo destinado a eliminar las desviaciones entre los precios del mercado y los valores, así que el precio de mercado de una mercancía coincida con su valor real.
Pero el problema del valor cuantitativo es más amplio que la mera cuestión de las proporciones del cambio, porque no se puede separar ya de las demandas del consumidor. Si se desea conocer tanto la proporción del cambio como la distribución del trabajo, es necesario contar con dos clases de información: 1) la información sobre el costo relativo en trabajo, 2) la información sobre la intensidad relativa de la demanda, es el único modo para lograr determinar el equilibrio económico general de la sociedad, porque hay que definir el estado de cosas que, si no ocurre ningún cambio en las condiciones básicas, persistirá, y es general porque no solo establece el valor relativo de los productos, sino que también establece las cantidades de producto producidas y la distribución de la fuerza de trabajo de la sociedad.
Marx especifica también que, bajo el capitalismo la demanda efectiva es solo parcialmente una cuestión relativa a las necesidades de los consumidores, la cuestión básica es la distribución del ingreso, que a su vez es un reflejo de las relaciones de producción, porque la ‘demanda social’ está esencialmente condicionada por las relaciones mutuas de las distintas clases económicas y sus posiciones económicas relativas 1) por la proporción entre la plusvalía total y los salarios, 2) por la división de la plusvalía en sus diversas partes.
Marx dice también que parecería que existe del lado de la demanda una magnitud precisa de necesidades sociales, que requiere una cantidad precisa de ciertos artículos en el mercado, pero la cantidad es muy elástica y cambiante, los limites dentro de los cuales la necesidad de mercancías en el mercado, la demanda, defiere cuantitativamente de la necesidad social real varia con respecto a las diversas mercancías, la diferencia entre la cantidad de mercancías que se exige y aquella cantidad que se exigiría si los precios de las mercancías en dinero fueran diferentes.
Entonces hay que aceptar que la demande del mercado está dominada por la distribución del ingreso y que las necesidades de los consumidores son elementos reactivos de la vida social, son un reflejo del desarrollo técnico y organizacional de la sociedad, y no viceversa.
Shumpeter hace notar también que los gustos de los consumidores no tendrán probablemente importancia a menos que ocasionen transferencias en el ingreso real: en los ciclos económicos y las tendencias de desarrollo del sistema capitalista la teoría de la opción de los consumidores es poco o nada pertinente.
El paso siguiente es advertir lo que Marx llamaba la ley del valor, que resume las fuerzas actuantes (que incluyen la productividad del trabajo, la norma de las necesidades sociales y las fuerzas equilibradoras de la oferta y la demanda), en una sociedad productora de mercancías que regula las proporciones de cambio de mercancías, la cantidad producida de cada una y la asignación de la fuerza de trabajo a las diferentes ramas de la producción, con la condición que sea una sociedad de productores privados que satisfagan sus necesidades por el cambio entre ellos.
La ley del valor es una teoría de equilibrio, con referencia a la producción simple de mercancías y adaptada después al capitalismo, y una de sus principales funciones es la de aclarar que aun una sociedad productora de mercancías existe un orden, también si nadie decide como asignar el esfuerzo productivo o cuanto se debe producir, pero todo se resuelve solo, y la ley del valor explica como sucede todo esto, y en la ley del valor se basa la teoría del concepto de ‘precio de producción’, y siendo el precio la expresión monetaria del valor, los precios de producción son modificaciones de los valores.
Los precios de producción se derivan de los valores de acuerdo con ciertas reglas generales, las desviaciones no son arbitrarias ni carecen de explicación, pero los elementos de monopolio dificultan el funcionamiento de la ley del valor como reguladora de las relaciones cuantitativas de producción y de cambio, el control de la oferta por el monopolista le permite aprovecharse de las condiciones de la demanda, las discrepancias entre el precio y el valor no están sometidas a ninguna regla, pero hay que aclarar que las relaciones de valor cuantitativo son perturbadas por el monopolio, pero las relaciones de valor cualitativo no.
Por esto, aun bajo condiciones de monopolio, podemos seguir midiendo y comparando mercancías y conjuntos de mercancías en términos de unidades de tiempo de trabajo, a pesar del hecho de que las relaciones cuantitativas precisas implicadas en la ley del valor han dejado de ser validas.
TEMA IV “PLUSVALÍA Y CAPITALISMO”
Es importante diferenciar entre la producción de mercancías en general con el capitalismo.
La producción simple de mercancías consiste en que cada productor posee y trabaja con sus propios medios de producción. Opera con el sistema M-D-M. Empieza con Mercancías, las convierte en Dinero, y una vez en Mercancías. Las Mercancías constituyen el principio y el final de la transacción.
En el capitalismo la propiedad de los medios de producción corresponde a un conjunto de individuos, mientras que otro realiza el trabajo- aquí tanto los medios de producción como la fuerza del trabajo, son mercancías, es decir, unos y otros son objetos de cambio. Opera con el sistema D-M-D´. El Capitalista se presenta en el mercado con Dinero, compra Mercancías (fuerza de trabajo y medios de producción), y después de un proceso de producción, vuelve al mercado con un producto que convierte en Dinero. Aquí el dinero es el principio y final.
Ante lo expuesto se puede deducir que la compra y venta de la fuerza de trabajo es la diferencia específica del Capitalismo.
El origen de la plusvalía:
La plusvalía para Marx está en la diferencia entre D´y D.
El Capitalista compra la fuerza de trabajo en su valor, paga al obrero como salario una suma correspondiente al valor de los medios de subsistencia del obrero.
Con su trabajo de un día el trabajador produce más que los medios de subsistencia de un día, en consecuencia, la jornada de trabajo puede dividirse en dos partes, trabajo necesario y trabajo excedente, el producto del trabajo necesario va a poder del obrero en forma de salario, mientras que el capitalista se apropia el producto del trabajo excedente, en forma de plusvalía (diferencia que existe entre el valor de la fuerza de trabajo y el valor de la mercancía que el trabajador produce)
Los componentes del valor
El valor de cualquier mercancía se puede dividir en tres formas: Capital constante (valores de los materiales y la maquinaria usados), capital variable (salarios) y Plusvalía.
La tasa de la plusvalía
Se define como la proporción de la plusvalía con respecto al capital variable.
P/V. La tasa de la plusvalía Marx la llama la tasa de explotación, la proporción de trabajo excedente con respecto al trabajo necesario.
La composición del capital
Es la proporción del capital constante con respecto al capital total.
C/C + V = O
La tasa de la ganancia
Es la proporción de la plusvalía con respecto al desembolso total de capital, se designa con una g. (P/c +v) = g
TEMA V LA ACUMULACIÓN Y EL EJÉRCITO DE RESERVA
5.1 Reproducción simple.
Se refiere a un sistema capitalista que conserva indefinidamente las mismas dimensiones y las mismas proporciones entre sus diversas partes. Para esto es necesario que los capitalistas repongan cada año el capital gastado y empleen toda su plusvalía en el consumo; y que los obreros gasten todo su salario en el consumo.
La condición básica de la reproducción simple es que el valor del capital constante usado en la rama de artículos de consumo debe ser igual al valor de las mercancías consumidas por los obreros y capitalistas dedicados a producir medios de producción.
La producción se divide en dos categorías:
Producción total de medios de producción y producción total de artículos de consumo, que dan lugar a la suma de la oferta social de mercancías y el ingreso del capitalista en medios de producción y consumo (plusvalía) y el ingreso del trabajor- salario-, que constituyen la demanda total de mercancías.
La suma de la oferta y la suma de la demanda deben estar equilibradas.
El plan de reproducción es en esencia un expediente para mostrar la estructura de las ofertas y demandas en la economía capitalista.
5.2 Las raíces de la acumulación.
El fin del capitalista es “Acumular” –como lo expresaba Marx- es conquistar el mundo de la riqueza social, acrecentar la masa de seres humanos explotados por él, y de este modo extender el predominio directo e indirecto del capitalista”
Marx señala en su teoría del consumo de los capitalistas, que sus gastos crecen con su acumulación.
De lo cual se deduce que los capitalistas quieren a la vez acumular y consumir.
5.3 La acumulación y el valor de la fuerza de trabajo planteamiento del problema
La acumulación implica un aumento en la demanda de fuerza de trabajo. Ahora bien cuando aumenta la demanda de una mercancía cualquiera, su precio sube asimismo; y esto lleva consigo una desviación del precio respecto del valor.
La acumulación eleva la demanda de fuerza de trabajo por lo que se rompe la igualdad entre los salarios y el valor de la fuerza de trabajo.
5.4 La solución de Marx: el ejército de reserva del trabajo
¿Qué es lo que mantiene los salarios iguales al valor de la fuerza de trabajo?
Marx lo soluciona a través del “ejército de reserva del trabajo” que consiste en obreros desocupados que, mediante su competencia activa en el mercado de trabajo, ejercen una presión constante, hacia abajo, en el nivel del salario.
El ejército de reserva se recluta principalmente entre aquellos que han sido desplazados por la maquinaria. Al introducir maquinaria, el capitalista lo que persigue es provocar desempleo, que a su vez actúa sobre el nivel del salario mismo. De aquí se deduce que cuanto más fuerte sea la tendencia de los salarios a subir, más fuerte será también la presión del ejército de reserva para contrarrestarla, y viceversa.
En la fase de prosperidad del ciclo económico el Empleo Industrial gana a expensas del Ejército de Reserva; por otra parte, a la crisis y la depresión corresponde una contracción del Empleo Industrial mientras el Ejército de Reserva crece.
5.5 La naturaleza del proceso capitalista
La acumulación por los capitalistas cesará del todo cuando sus ganancias sean tan bajas que no representen para ellos una compensación adecuada por las molestias y los riesgos que necesariamente afrontan empleando su capital en forma productiva.
La teoría clásica considera a los métodos de producción como dependientes de invenciones y descubrimientos fortuitos, en la teoría de Marx se convierten en condición necesaria para prolongar la existencia de la producción capitalista. Pues es por medio de las innovaciones tecnológicas para economizar trabajo, como se recluta el ejército de reserva, y sólo por la existencia continua del ejército de reserva puede sobrevivir la plusvalía y la clase que ella sostiene.
Cáp. VI “LA TENDENCIA DESCENDESTE DE LA TASA DE GANANCIA”
6.1 La formulación de la ley por Marx
Si partimos de la base que la productividad del trabajo crece y que la proporción del desembolso del capitalista en materiales y maquinaria con respecto al desembolso total, también asciende sostenidamente, de ello derivó Marx su famosa ley del epígrafe (subrayada):
g = p´ (1- o )
g = tasa de ganancia
P´ = tasa de plusvalía constante
o = composición orgánica del capital (proporción del desembolso del capitalista en materiales y maquinaria con respecto al desembolso total)
Si sube o tiene que bajar g, y como hemos establecido que o tiene una tendencia ascendente en el curso del desarrollo capitalista, g tiene una tendencia a caer.
Marx trataba de demostrar que ciertos obstáculos internos se oponían al desarrollo indefinido de la producción capitalista, por una parte, una composición orgánica creciente del capital es la expresión de la creciente productividad del trabajo, y por otra parte, la tasa descendente de la ganancia que la acompaña tiene que cerrar al fin los cauces de la iniciativa capitalista.
6.2 Las causas contrarrestantes
Marx enumera seis causas que contrarrestan y anulan la ley general enunciada en el punto anterior, dejándole solamente el carácter de una tendencia, la sexta se relaciona con la forma de calcular la tasa de ganancia, y no la vamos a examinar aquí, las otras pueden ser clasificadas según que su efecto sea mantener baja la composición orgánica del capital (o) o elevar la tasa de plusvalía (P´).
En la primera clasificación entra el abaratamiento de los elementos del capital constante, mientras que en la segunda encontramos el aumento de la intensidad de explotación, la depresión de los salarios más abajo de su valor y la sobrepoblación relativa. Una de las causas, el comercio exterior entra en ambas clasificaciones, veamos como operan cada una de ellas:
Abaratamiento de los elementos del capital constante
El uso creciente de maquinaria, elevando la productividad del trabajo, disminuye el valor por unidad del capital constante. El valor del capital constante, aunque crece sin cesar, no puede hacerlo en la misma proporción que el volumen material de los medios de producción que pone en movimiento la misma cantidad de fuerza de trabajo.
Aumento de la intensidad de explotación
La prolongación de la jornada de trabajo eleva directamente la tasa de plusvalía, aumenta el trabajo excedente sin afectar al trabajo necesario. El acelerar y estirar aumenta la tasa de plusvalía haciendo entrar el trabajo necesario en un tiempo más corto, dejando una parte de la jornada de trabajo no alterada para el trabajo excedente, y el efecto en cualquiera de los casos es elevar la tasa de ganancia. Estos métodos no están necesariamente relacionados con una composición orgánica ascendente del capital.
Depresión de los salarios más debajo de su valor
La reducción salarial la menciona Marx de paso, puesto que él se apoya en la suposición general de que los precios y los salarios están determinados por el mercado, suposición que rechaza la posibilidad de una política agresiva por parte de los capitalistas.
Sobrepoblación relativa
El aumento creciente del uso de la maquinaria deja sin trabajo a cierto número de trabajadores, creando así la sobrepoblación relativa o ejército de reserva, que trae consigo una bajada de salarios y se eleva por este medio la tasa de plusvalía.
Comercio exterior
A veces las materias primas y los artículos necesarios para el consumo, se adquieren en el exterior porque resultan más baratos que producirlos en el país. Esto hace que se abarate los elementos del capital constante, y en parte los artículos necesarios para la vida por los cuales se cambia el capital variable, ello tiende a elevar la tasa de la ganancia elevando la tasa de plusvalía y reduciendo el valor del capital constante, este factor entra, por consiguiente, en las dos clasificaciones de las causa contrarrestantes que hemos mencionado.
6.3 Una crítica a la ley
Es correcto suponer una composición orgánica ascendente del capital, pero ¿se justifica, sin embargo, el suponer al mismo tiempo una tasa constante de la plusvalía?, es preciso tener claridad sobre las implicaciones de esta última suposición. Una composición orgánica ascendente del capital va unida con la creciente productividad del trabajo. Si la tasa de la plusvalía permanece invariable, esto significa que se elevan los salarios reales proporcionalmente al aumento de la productividad en el trabajo, supongamos que la productividad del trabajo se duplica, entonces, puesto que una tasa de la plusvalía inalterable significa que el obrero trabaja la misma cantidad de tiempo para sí, y la misma cantidad para el capitalista, que antes, resulta que la producción total física representada por el salario como la representada por la plusvalía se han duplicado también, sin embargo, hay dudas razonables para que el resultado de esta suposición sea el correcto.
El trabajo pasado (el que está en paro), en forma de capital constante, mantiene una relación de competencia con el trabajo viviente (el trabajo actual) y frena las demandas de este último por la ley del mercado, y la suposición d Marx de una tasa constante de la plusvalía con la productividad ascendente del trabajo parece pasar por alto este efecto, aunque Marx trata este problema incluyendo la superpoblación relativa, sería mejor reconocer desde el principio que la productividad ascendente tiende a llevar consigo una tasa más alta de plusvalía.
Difícilmente se justifica la suposición de Marx de una tasa constante de la plusvalía coexistiendo con una composición orgánica ascendente del capital, porque un ascenso de esta última significa necesariamente un aumento de la productividad del trabajo, y si se supone que tanto la composición orgánica del capital como la tasa de plusvalía son variables, como creemos que debería hacerse, entonces la dirección en que la tasa de la ganancia variará se hace indeterminada.
Es seguramente verdad que la cantidad de maquinaria y materiales por obrero ha mostrado una tendencia a crecer muy rápidamente, pero la composición orgánica del capital es una expresión de valor; y debido a la productividad del trabajo en ascenso constante, el crecimiento en el volumen de maquinaria y materiales por obrero no debe considerarse como un índice del cambio en la composición orgánica del capital.
No hay ninguna suposición general de que los cambios en la composición orgánica del capital serán relativamente tan superiores a los cambios en la tasa de plusvalía que los primeros dominarán los movimientos en la tasa de ganancia; por el contrario parecería que debemos considerar las dos variables como de importancia aproximadamente coordinada; por esta razón la formulación de la Ley por Marx no es muy convincente, y tampoco lo es los intentos hechos para demostrar que una composición orgánica ascendente del capital debe ser acompañada por una tasa ascendente de la ganancia. Tras de la composición orgánica ascendente del capital está el proceso de acumulación de capital, y es aquí donde debemos buscar las fuerzas que tienden a deprimir la tasa de la ganancia.
Además de las fuerzas estudiadas que influyen en la tasa de ganancia, existen otras que las podemos clasificar en aquellas que tienden a deprimirla, y aquellas otras que tienden a elevarla:
Fuerzas tendentes a deprimir la tasa de ganancia
1.- Los sindicatos
2.- La acción del Estado en beneficio de los trabajadores
Fuerzas tendentes a elevar la tasa de ganancia
1.- Las organizaciones patronales
2.- La exportación de capital
3.- La formación de monopolios
4.- La acción del estado en beneficio del capital
Cáp. VIII “LA NATURALEZA DE LAS CRISIS CAPITALISTAS”
El problema de las crisis, aunque persistente en las obras de Marx, nunca fue tratado, analizado por él. Esto es debido a la complejidad que encierran estos “fenómenos”, frutos de complejas fuerzas económicas, sin posibilidad de ser estudiados por Marx partiendo de los sistemas “tipo” de los que partía en su obra “El Capital”, aunque sí apareciesen todos los aspectos del problema de la crisis en los niveles de abstracción más altos, siendo una cuestión de tiempo el que Marx no se ocupase de las crisis.
La producción simple de mercancías y la crisis
En sociedades avanzadas más allá del trueque ocasional, los intercambios se producen (mercancía – dinero – mercancía), pudiéndose producir estos intercambios en diferentes momentos de espacio y tiempo.
La utilización de la moneda permite al productor vender su producto a su término y comprar a su satisfacción lo que le hace falta.
Este contexto económico (organización de la producción por medio del cambio privado) puede generar una gran crisis, en la que aparecen existencias de mercancías invendibles y necesidades insatisfechas en el momento en el que existan circunstancias que lleven a un productor (A), a interrumpir el proceso de cambio de sus propios productos por los productos de otros. Esta “crisis”, sería una crisis de sobreproducción.
Las razones que llevan a este comportamiento, por el cual los productores siguen esta conducta en una sociedad de producción simple pueden ser por un desastre natural, la guerra o algún otro acontecimiento catastrófico.
Sobre este origen de crisis, encontramos un buen ejemplo en el “atesoramiento”, basado en la sed de oro del avaro, el cual se da más en las condiciones próximas a la producción simple de mercancías que en sociedades más avanzadas.
No parece fácil que un atesoramiento pueda provocar una crisis violenta y súbita tipo a las de tiempos más modernos.
Dado que las mercancías en sistema de producción simple de mercancías circulan acorde (Mercancía – Dinero – Mercancía), lleva implícito las posibilidades de una crisis, pero también se trata de producción para el consumo, y dado que el consumo es un proceso continuo, es menos temible “la crisis”.
La Ley de Say
Se ha apreciado en los economistas clásicos una falta de perspectiva histórica al no distinguir entre producción simple de mercancías y producción capitalista. Se aplicaban teoremas a la producción capitalista, extrapolando los teoremas del modelo de producción simple de mercancías.
Un ejemplo claro nos lo ofrece un dicho famosos en la literatura económica “Ley de mercados de Say”, que toma su nombre de Jean Baptiste Say, discípulo de Adam Smith.
Esta Ley indica que la circulación de (Mercancía – Dinero – Mercancía), no puede detenerse ya que una venta sigue a una compra por igual cantidad. Esta teoría implica que nunca pueda darse una crisis ni una sobreproducción.
Si bien esta teoría parece cumplirse por lo general en los modelos de producción simple de mercancías, en los modelos en los que se dan otras circunstancias cualesquiera, no es así.
El Capitalismo y la crisis
La fórmula de circulación (Mercancía – Dinero – Mercancía), característica de la producción simple de mercancías, se convierte bajo el capitalismo en (Dinero – Mercancía – Dinero), desde el punto de vista de la circulación, ésta en la diferencia fundamental entre ambas.
En el modelo de producción simple de mercancías, lo que en realidad ocurre en el proceso de circulación (M – D – M), es que en el propósito del cambio lo que se da es la adquisición de valor de uso y no el incremento del valor de cambio.
Bajo el capitalismo, la forma de circulación es totalmente diferente. (D – M – D). El capitalista inicia su carrera con dinero lanzándolo a la circulación a cambio de fuerza de trabajo y medios de producción. Cuando este proceso ha concluido, el capitalista vuelve a aparecer en el mercado con mercancías que transforma de nuevo en dinero. La D inicial y la D final, representan valor de cambio.
Así, para el capitalista la base objetiva de la expansión del valor, se convierte en un propósito subjetivo, convirtiéndose en un único móvil la apropiación de más y más riqueza en abstracto.
La diferencia esencial entre la figura del “avaro” y el capitalista es que a uno le satisface retirar el dinero de la circulación, mientras que el otro devuelve constantemente su dinero a la circulación, cambiando el carácter del proceso de circulación.
Esto explica que el capitalismo es producción para obtener ganancia y es esto también lo que le hace susceptible a las crisis y a la sobreproducción.
La diferencia de motivos y de conducta entre el capitalista y el obrero, proviene de la diferencia (M – D – M) y (D – M – D), de las circunstancias objetivas diferentes en que cada quién está colocado.
La economía política ortodoxa ha caído en los errores tanto de suponer que bajo el capitalismo cada uno es impulsado por el deseo de obtener ganancias, o que cada uno se interesa solamente por los valores de uso.
Centrando la lectura la crisis en la relación D – M – D conociendo que el capitalista se concreta en incrementar D.
Hay que tener en cuenta que la crisis, o su posibilidad formal, no diferencian entre la producción simple de mercancías y el capitalismo. Todo lo aplicado a la producción simple de mercancías, aplica también al capitalismo, cualquier interrupción en el proceso de circulación, puede iniciar una contracción en el proceso de la circulación, el cual, dará origen al fenómeno de la sobreproducción, reflejándose en el descenso de la propia producción.
Dado que el incremento de “Dinero” es vital para que el capitalista considere la conveniencia de lanzar su “Dinero” a la circulación, el propio incremento de “Dinero” es el talón de Aquiles del capitalismo.
Así el texto analiza dos posibles casos que muestro gráficamente:
1)
Los capitalistas retirarán su capital, se reducirá la circulación y se iniciará una crisis seguida de sobreproducción.
2)
En este caso, pueden darse razones para que los capitalistas reduzcan sus operaciones lo bastante como para provocar una crisis.
Las crisis pueden sobrevenir solamente por el hecho de que la tasa de ganancia descienda más allá de su nivel ordinario, o simplemente porque se haya reasignado una nueva y más baja tasa, no siendo necesario que dicha tasa deba desaparecer o volverse negativa para que surja una crisis.
Otra cuestión a plantear es el descubrimiento de los teóricos modernos a un nivel de abstracción más bajo que Marx. Para ellos, el capitalista se divide en dos secciones.
Empresario que dirigen y organizan los procesos de la producción.
Poseedores de capital en dinero.
Así planteado, los empresarios poseedores de dinero, se lo prestan a un tipo alto de interés a sí mismos. Esto implica que los capitalistas antes de prestar a un tipo inferior, prefieren acumular los capitales.
El efecto de éstos con respecto a los capitalistas empresarios, es el mismo. Los capitalistas al no prestar a tipos de interés inferiores, provocan el mismo fenómeno que se provoca con la negativa de los capitalistas industriales a producir a tasas inferiores de ganancias de las esperadas.
Se ha establecido que la tendencia de la tasa de ganancia es descendente en términos generales. Este cálculo se hizo suponiendo que todas las mercancías se vendían en sus valores de equilibrio.
Si se abandona la posición de que todas las mercancías se vendan en sus valores de equilibrio, aparece otra posible causa de descenso en la lucratividad. Los capitalistas pueden verse imposibilitados para vender las mercancías en sus valores, lo que provocaría la crisis.
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